Yahoo Noticias La alegría de Juan José Campanella por la nominación al Oscar de Argentina, 1985 y su expreso pedido
Juan José Campanella, ganador del Oscar por El secreto de sus ojos en 2010, dio su opinión acerca de la nominación de Argentina, 1985 a los premios de la Academia. El aclamado director elogió la realización dirigida por Santiago Mitre, aunque hizo una puntualización respecto a la permanencia que tuvo la película en los cines.
A través de las redes sociales y en diálogo con la agencia EFE, el director argentino manifestó su alegría por este nuevo hito para el cine nacional. “Que Argentina, 1985 esté nominada al Oscar es algo muy bueno para todos, me alegra mucho”, compartió el cineasta al ser consultado al respecto poco antes de asistir a la inauguración del quinto Ibero American Film Festival de Miami.
Campanella consideró que el relato audiovisual que recrea el juicio a las Juntas Militares de la última dictadura “es una película buena y con un elenco estelar”, remarcó. A través de Twitter, el director también felicitó por la candidatura al productor Axel Kuschevatzky y al principal protagonista de la ficción, Ricardo Darín, quien encarna en el film al abogado Julio César Strassera. “¡Felicitaciones, “Argentina, 1985″! Tercera copa, tercer… ¡Elijo creer!”, escribió en el posteo.
Sin embargo, el realizador de El hijo de la novia aprovechó la oportunidad para dar su opinión respecto a la permanencia de la película en las salas comerciales de Argentina. Campanella consideró que la realización ha estado poco tiempo en cines, puesto que días después de su estreno pasó a ser parte de la oferta de la plataforma Amazon Prime Video, y abogó, ahora que es candidata al Oscar a Mejor película internacional, por el regreso de la película a las salas.
El director se encuentra en Miami con motivo del homenaje que recibirá hoy en el marco del Ibero Aamerican Film Festival, con la proyección de dos de sus realizaciones, El cuento de las comadrejas (2019) y Metegol (2013).
En 2010, Campanella ganó el Oscar en la categoría entonces denominada Mejor película de habla no inglesa, por El secreto de sus ojos, protagonizada, como Argentina, 1985, por Ricardo Darín. Solo otro argentino obtuvo ese mismo reconocimiento por parte de la Academia de las Artes Cinematográficas de Estados Unidos: Luis Puenzo, quien ganó la estatuilla en 1985 con La historia oficial.
En cuanto a Argentina, 1985, cabe señalar que antes de su llegada al streaming, la película protagonizada por Ricardo Darín y Peter Lanzani fue vista por casi 900.000 espectadores en sus primeras tres semanas en cartel, durante las cuales provocó un debate profundo y de ricas aristas sobre el legado del Juicio a las Juntas Militares, encabezado por los fiscales Julio César Strassera y Luis Moreno Ocampo.
El film de Santiago Mitre solo se proyectó en el 30 por ciento de las salas del país, debido al conflicto que, tiempo atrás, se desató entre las principales cadenas cinematográficas y la plataforma que lo produjo, Amazon Prime Video. Complejos como Hoyts, Cinemark, Cinépolis y Showcase decidieron no programarla en su cartelera al no estar de acuerdo con la ventana de exhibición que la plataforma Amazon Prime Video les permitía, antes de su llegada al streaming que la puso a consideración del público global.
La película argentina obtuvo dos distinciones en el Festival Internacional de Cine de Venecia, recibió el premio del público en el Festival de Cine de San Sebastián, obtuvo el Globo de Oro y este martes quedó nominada al Oscar, en lo que ya es un recorrido por demás exitoso en la temporada de premios.
El galardonado film está inspirado en la historia real de los fiscales Julio César Strassera y Luis Moreno Ocampo, que en 1985 enjuiciaron a la dictadura militar más sangrienta de la historia argentina. Sin dejarse intimidar por la todavía considerable influencia militar en la nueva y frágil democracia, Strassera y Moreno Ocampo reunieron un joven equipo jurídico de inesperados héroes para su batalla de David contra Goliat. Bajo amenaza constante sobre ellos y sus familias, corrieron contra el tiempo para hacer justicia.
