Como alcalde a tiempo parcial de Miami, Francis Suárez tiene poco poder pero grandes reflectores

Cuando manifestaciones y disturbios civiles sacudieron Miami tras la muerte de George Floyd, el alcalde Francis Suárez estuvo en la sala donde los altos mandos policiales dirigían la respuesta de la ciudad a las protestas que desembocaron en saqueos de las tiendas del downtown.

Al alcalde, que carecía de poderes administrativos, se le animó amablemente a situarse en un lugar más alejado de la acción, uniéndose a los comisionados municipales que estaban de visita en las inmediaciones, según un ex jefe de Policía.

“Estuvo donde se tomaban las decisiones”, recordó el jueves Jorge Colina, jefe de Policía de Miami en aquella época. “Al final, por supuesto, educadamente, con delicadeza, le dije: ‘Lo que sería estupendo, lo que agradecería, es que todos se reunieran en una sala diferente”.

Mientras lanza una campaña para dirigir Estados Unidos como presidente, el alcalde republicano de Miami, de 45 años, se está posicionando en el centro de la respuesta de la ciudad a la delincuencia, los males sociales y los desafíos económicos.

“Ahora, en lugar de 6,000 personas sin hogar, tenemos 608”, dijo Suárez en un video de presentación publicado en el portal digital de su campaña, en que promociona los programas contra la adicción en Miami y compara las estadísticas de la ciudad de hace décadas con el recuento de personas que viven en la calle desde la pandemia. “Y no he terminado”.

Ahora en su segundo mandato como alcalde a tiempo parcial de Miami, Suárez no supervisa a los agentes de policía, los camiones de basura o las cuadrillas de ambulancias, como hacen otros alcaldes de grandes ciudades.

El alcalde de Miami, Francis Suárez, con el jefe de policía de Miami, Jorge Colina, detrás de él, habla sobre la seguridad de los electores durante una conferencia de prensa en el Ayuntamiento de Miami, el lunes 19 de octubre de 2020.
El alcalde de Miami, Francis Suárez, con el jefe de policía de Miami, Jorge Colina, detrás de él, habla sobre la seguridad de los electores durante una conferencia de prensa en el Ayuntamiento de Miami, el lunes 19 de octubre de 2020.

Más bien, el poder de Suárez recae sobre todo en el ámbito legislativo. Tiene autoridad de veto sobre las ordenanzas que emite la Comisión municipal. Puede declarar emergencias y contratar y despedir al administrador municipal de Miami, aunque los comisionados pueden invalidar la selección de un alcalde para el cargo.

Aun así, Suárez es la figura de más alto perfil en el gobierno de esta ciudad de 440,000 habitantes, y ha usado su posición como alcalde para influir en decisiones importantes. El año pasado, Suárez consiguió una ajustada votación en la Comisión para aprobar el complejo comercial y estadio de fútbol de David Beckham en un campo de golf de la ciudad.

El embajador electo de Miami

Es más conocido como evangelizador del papel de Miami como centro tecnológico y financiero, especialmente tras su publicación viral en Twitter en la que preguntaba “¿Cómo puedo ayudar?” a un fondo de inversión que planteaba la idea de trasladar todo Silicon Valley a Miami a finales de 2020. Dos años después, el Financial Times declaró Miami “la ciudad más importante en Estados Unidos” y Suárez fue invitado a hablar en el Foro Económico Mundial que se celebra cada año en Davos, Suiza.

Saif Ishoof, ex asesor de Suárez que ahora es copropietario de una empresa de consultoría empresarial en Miami, atribuyó al alcalde el mérito de aprovechar las universidades y organizaciones sin ánimo de lucro locales para centrarse en la capacitación tecnológica, animar a los fondos de inversión a aumentar las asignaciones para las nuevas empresas del sur de la Florida y promover Miami como un lugar acogedor para hacer negocios.

“Se centró en el ecosistema”, dijo Ishoof, socio de Lab22c. “Creo que es un narrador eficaz y alguien que domina la información. Eso es realmente lo que se necesita”.

La influencia de Suárez en del gobierno de la ciudad está ahora bajo escrutinio después que el Miami Herald informó que recibía $10,000 al mes del urbanizador Rishi Kapoor, quien a su vez solicitó ayuda a la oficina de Suárez para asuntos de permisos que el Departamento de Construcción de la ciudad resolvió finalmente a favor del urbanizador.

Suárez, que es abogado, dijo que su trabajo para Kapoor no afectaba a asuntos municipales y que la ayuda de su personal era una asistencia rutinaria disponible para todos los constructores.

Críticas del ex alcalde Giménez

Sin un papel diario en la administración de la ciudad, Suárez está recibiendo críticas por enlazar su anuncio presidencial con los logros de Miami. Carlos Giménez, ex alcalde de Miami-Dade que apoya al ex presidente Donald Trump en las primarias del Partido Republicano, se presentó esta semana en televisión para arremeter contra Suárez por considerarlo un “farsante” que intenta inflar sus credenciales.

“Necesito que la gente sepa sobre esta ilusión que está tratando de pintar”, dijo Giménez, ahora miembro republicano del Congreso que representa a los suburbios en las afueras de Miami y los Cayos. “Que de alguna manera todo lo que ocurre en Miami se debe a él”.

Carlos Giménez, representante federal por el Distrito Congresual 26 de la Florida y ex alcalde del Condado Miami-Dade, habla a la audiencia durante un servicio conmemorativo para Michael A. Finney, presidente ejecutivo del Miami-Dade Beacon Council, en el Miami Dade College, Wolfson Campus, en el downtown de Miami, Florida, el lunes 25 de abril de 2022.

Los dos se enfrentaron cuando ambos eran alcaldes durante el primer año de la pandemia. A diferencia de Suárez, Giménez ocupaba un cargo con poder administrativo, ya que los estatutos de Miami-Dade otorgan al alcalde plena autoridad sobre todos los empleados del condado, incluida la Policía.

Ambos también compitieron por ser la voz principal del área de Miami durante la crisis y Giménez se quejaba de que Suárez intentaba hablar de asuntos que no eran de su competencia.

A principios de la pandemia, Suárez envió una carta a la Casa Blanca exhortando a Trump a suspender los vuelos al Aeropuerto Internacional de Miami (MIA) procedentes de ciudades estadounidenses y otros países con altos índices de infección por COVID-19. “Mi administración está dispuesta a proporcionar cualquier ayuda que esté a nuestro alcance”, escribió Suárez a Trump en la carta del 2 de abril de 2020.

La petición no sentó bien a Giménez, que supervisaba el aeropuerto, propiedad del condado. Su administración envió una carta al día siguiente a Washington señalando que Suárez no tenía autoridad sobre el MIA, y los vuelos continuaron. “Quiero asegurar de que la gente entiende que lo que está vendiendo no es cierto”, dijo Giménez.

Se atribuye el mérito del descenso de la delincuencia

El portal digital de la campaña de Suárez enlaza con un ensayo de Fox News que escribió en abril en el que ofrecía Miami como modelo nacional de lucha contra la delincuencia. “Aumentamos los fondos para nuestra Policía, haciendo crecer nuestro departamento hasta ser el más grande de nuestra historia”, escribió Suárez. “El resultado: la delincuencia cayó a uno de sus niveles más bajos en la historia de Miami”.

Suárez no vetó la propuesta de presupuesto del administrador municipal Art Noriega en 2020 que incluía reducciones de plazas en la Policía y redujo el total de plazas en la dependencia de 1,805 a 1,672, según un resumen del presupuesto en portal digital de la ciudad. El presupuesto más reciente muestra un aumento de 8% a 1,803 plazas.

Aunque no supervisó la respuesta policial a las manifestaciones de 2020, Suárez desempeñó un papel central en la respuesta pública de la ciudad a la violencia y las protestas.

“Quiero dar las gracias a los miembros de la Policía de Miami que demostraron una increíble moderación y resolución frente a los actos de provocación y ataques personales en el último día”, dijo Suárez al comienzo de una conferencia de prensa el 31 de mayo de 2020. “Superaremos estos momentos difíciles y haremos lo correcto por nuestros ciudadanos”.

Colina, el ex jefe de Policía que dejó la ciudad en 2021, dijo que no está listo para apoyar a Suárez mientras busca el cargo más alto del país.

“¿Votaría por él como presidente? No”, dijo Colina, quien es independiente. “Se trata del presidente de Estados Unidos. Personalmente me fijaría en alguien con más experiencia”.