AI denuncia devoluciones de migrantes y represión contra ONG en Grecia

Atenas, 28 mar (EFE). - Amnistía Internacional (AI) ha denunciado que las autoridades griegas siguen realizando devoluciones en caliente de migrantes y refugiados en el Mar Egeo, al tiempo que ejercen represión contra las ONG que los ayudan.

En su informe 2022/2023 sobre la situación de los derechos humanos en el mundo, AI indica que en Grecia se producen detenciones ilegales de solicitantes de asilo en la isla de Samos, así como el abandono de grupos de migrantes en islotes del río Evros, frontera entre Grecia y Turquía, “en condiciones espantosas”.

Aunque el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) había ordenado medidas cautelares a favor de los refugiados, las autoridades griegas optaron por dejarlos a la deriva o devolverlos en caliente a Turquía, señala el informe.

Según datos del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), que cita el informe, el año pasado 326 migrantes murieron o desparecieron en el Mediterráneo Oriental, frente a 115 en 2021.

AI recalca que hasta finales del año pasado seguían pendientes ante el TEDH varios casos contra Grecia por la presunta expulsión ilegal de migrantes, una práctica que continuó en 2022, según revelaciones de ONG y medios griegos.

En el informe se denuncia, igualmente, la “criminalización de la ayuda humanitaria” en el país, ya que siguen abiertos varios casos penales contra voluntarios de ONG que abogan por los derechos de los refugiados.

Otro punto de crítica es el cese en febrero de un programa financiado por la Unión Europea que otorgaba viviendas a solicitantes de asilo, que resultó en el traslado de varios de ellos a campos en zonas aisladas.

El informe denuncia además un uso excesivo de la fuerza por la Policía durante protestas del año pasado, mientras hace también referencia al caso de Kostas Frangulis, un gitano de 16 años que murió tras recibir un balazo en la cabeza por un agente durante una persecución en diciembre.

AI hace también hincapié en el derecho a la privacidad y critica una ley presentada por el Gobierno conservador que, según denuncia, “legaliza el uso de programas espía por las autoridades”.

La ley fue aprobada en diciembre, unos meses después de que estallara un escándalo de escuchas a políticos y periodistas por parte de los servicios secretos.

(c) Agencia EFE