Los tres rascacielos Trump Towers ubicados en Sunny Isles Beach atraen a una gran cantidad de curiosos e interesados, gracias al acuerdo comercial de Donald Trump que le dio su nombre a los elegantes condominios con vista al mar.

El jueves, sin embargo, los lujosos rascacielos llamaron la atención de una agencia del orden público: el Buró Federal de Investigaciones (FBI).

Un equipo de agentes especiales del FBI, con la asistencia de la policía local, llegó a la torre Trump Tower III, localizada en el 15811 Collins Avenue, con una orden para registrar la unidad 4102. El condominio es propiedad de una compañía fantasma, MIC-USA LLC, que es controlada por dos empresarios rusos, Oleg Sergeyevich Patsulya y Agunda Konstantinovna Makeeva, según archivos corporativos estatales.

El viernes, un portavoz de la oficina en Miami del FBI, dijo que “la agencia realizó una actividad que ordenó la corte cerca del lugar”, pero no dio más detalles.

Patsulya y Makeeva no pudieron ser localizados para conocer qué pensaban del registro. Roza Pereira, esposa de Patsulya, que también aparece en los documentos corporativos estatales de MIC-USA LLC, dijo que estaba al tanto de la redada del FBI.

“No puedo hablar del asunto”, le declaró Pereira al Miami Herald. “El abogado de mi esposo dijo que no hablara con nadie. No tengo la menor idea de lo que se trata”.

Sunny Isles Beach ha sido bautizado como el “Pequeño Moscú” por los vecinos, debido a la gran cantidad de expatriados rusos que viven allí. Algunos residentes han expresado preocupaciones por posibles reacciones negativas contra su próspera comunidad después de la invasión militar rusa a Ucrania el año pasado, así como las sanciones que el gobierno de Estados Unidos está tomando contra los oligarcas que esconden su riqueza en bienes raíces en el sur de la Florida y otra partes del país.

Antes de convertirse en presidente en el 2016, Trump firmó un acuerdo con los urbanistas de los edificios de 45 pisos para que utilizaran su nombre en la propiedad y de este modo ayudara a darle promoción a las ventas. Compradores extranjeros, sobre todo de América Latina y Rusia, han llenado las Trump Towers, al igual que hicieron con otras propiedades en Sunny Isles Beach que llevan el nombre de Trump.

Entre los compradores está MIC-USA, que compró el condominio de tres dormitorios y tres baños en Trump Tower III por $1.65 millones hace 10 años, de acuerdo con archivos de propiedades del Condado Miami-Dade.

En el 2020, BAC Florida Bank, que dio financiamiento para la compra, demandó a Patsulya y Makeeva, argumentando que ambos habían incumplido su hipoteca de $975,000. La disputa se solucionó a finales de ese año, aunque no se sabe bien de qué forma. MIC-USA, controlada por los dos rusos, sigue siendo propietaria de la unidad del cuarto piso de Trump Tower III.

Traducción de Jorge Posada