Afganistán toma juramento a su nuevo presidente en medio de violencia

Afganistán tomó juramento el lunes a su primer presidente nuevo en una década, Ashraf Ghani, para liderar un gobierno de poder compartido en momentos en que la retirada de la mayoría de las tropas extranjeras presenta una prueba crucial. En la imagen, Ghani toma posesión del cargo en Kabul, el 29 de septiembre de 2014. REUTERS/Omar Sobhani

Por Kay Johnson KABUL (Reuters) - Afganistán tomó juramento el lunes a su primer presidente nuevo en una década, Ashraf Ghani, para liderar un gobierno de poder compartido en momentos en que la retirada de la mayoría de las tropas extranjeras presenta una prueba crucial. La primera entrega de poder democrática en la historia afgana ha estado lejos de ser tranquila: el acuerdo para un Gobierno de unidad fue alcanzado después de meses de estancamiento por una votación en la que tanto Ghani como su oponente Abdulá Abdulá se adjudicaban la victoria. Ilustrando los problemas que afronta el nuevo presidente, un atacante suicida con bomba mató a siete personas en un puesto de seguridad cerca del aeropuerto de Kabul, justo antes de que Ghani jurara en el cargo, dijo un funcionario del Gobierno. Los talibanes se adjudicaron la responsabilidad. Más tarde, poniendo fin a meses de incertidumbre por el futuro rol de Estados Unidos en Afganistán, la embajada estadounidense anunció que Ghani firmaría el martes un acuerdo de seguridad con Washington que permitiría que un pequeño contingente de soldados permanezca en el país. En su discurso inaugural, Ghani apeló a los talibanes y a otros militantes para que se unan a las conversaciones de paz y pongan fin a más de una década de violencia. Miles de afganos mueren cada año debido a la insurgencia. "La seguridad es una demanda principal de nuestro pueblo y estamos cansado de esta guerra", dijo Ghani. "Estoy llamando a los talibanes y a Hezb-i-Islami para prepararse para negociaciones políticas", sostuvo. Hezb-i-Islami es una facción islamista aliada con los talibanes. Ghani también prometió combatir la rampante corrupción y pidió cooperación dentro del gobierno de coalición. "Un gobierno de coalición nacional no se trata de compartir el poder sino de trabajar juntos", dijo Ghani durante su discurso que duró cerca de media hora. Pero incluso si sus máximas figuras pudieran trabajar juntas, el gobierno hereda enormes problemas, que incluyen combatir a los talibanes, que en los últimos meses han lanzado ataques más agresivos a medida que los soldados extranjeros se retiran. Uno de los primeros actos de Ghani como presidente será la firma de un acuerdo bilateral para permitir que algunas fuerzas estadounidenses permanezcan en el país para entrenar y ayudar al Ejército y la policía afganos, y para que Estados Unidos mantenga algunas bases militares. Se espera que unos 10.000 soldados se queden en el país. Una fuente de la embajada de Estados Unidos dijo que Ghani firmaría el acuerdo a primera hora del martes en el palacio presidencial en Kabul.