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Acusan de sedición a líder de partido político tailandés

El líder del Partido Nuevo Futuro de Tailandia, Thanathorn Juangroongruangkit, es rodeado por sus partidarios a su llegada a una comisaría de policía en Bangkok, Tailandia, el sábado 6 de abril de 2019. (AP Foto/Sakchai Lalit)

BANGKOK (AP) — El líder de un nuevo y popular partido político tailandés que ocupó el tercer lugar en las elecciones generales del mes pasado fue acusado formalmente el sábado de sedición y expresó su preocupación de que vaya a ser juzgado en un tribunal militar.

Thanathorn Juangroongruangkit fue recibido en una comisaría de policía por cientos de seguidores que corearon: “¡Sigue luchando, Thanathorn!” El político negó los cargos, que conllevan una sentencia de hasta nueve años de prisión.

"Estoy preocupado porque este caso está bajo el tribunal militar en lugar del tribunal penal", dijo a los periodistas Thanathorn, líder del Partido Nuevo Futuro. "Eso es bastante inquietante", agregó.

Dijo que fue tratado con justicia por la policía y reafirmó su inocencia. Dijo que "muchos ciudadanos en Tailandia" han sido acusados de sedición, "incluso aquellos que no han recibido ninguna atención pública".

"El régimen crea miedo a la sociedad para silenciarnos", dijo Thanathorn. "Insisto en que soy inocente y estoy dispuesto a mantenerme firme en los procedimientos judiciales. Insto a todos los tailandeses y a la comunidad internacional a que hagan un llamamiento a favor de los derechos civiles... para el mejoramiento de nuestra sociedad".

El subjefe de policía de Tailandia, Srivara Ransibrahmanakul, dijo el miércoles que los cargos contra Thanathorn se derivan de su papel en una manifestación estudiantil el 24 de junio de 2015. Dijo que el caso se había estancado debido a varias reorganizaciones entre los oficiales responsables.

Thanathorn, sin embargo, dijo que considera que el caso tiene motivaciones políticas porque "el momento no podría haber sido más coincidente que éste, justo una semana después de las elecciones".

Tailandia ha estado dirigida por un gobierno militar desde el golpe de Estado de 2014. La junta gobernante ha mantenido un control estricto sobre la disidencia, presentando cargos penales contra los críticos, con algunos detenidos durante semanas para sesiones de "ajuste de actitud" en las bases militares en un intento por cambiar sus puntos de vista.