Acude a un hospital creyendo que tenía piedras en el riñón y termina dando a luz

Stephanie Jaegers empezó a sentirse mal cuando estaba en su casa. Notaba una especie de dolor punzante en la parte baja de su estómago. La sensación desagradable se le iba a veces cerca de la cadera y notaba algún que otro ramalazo en su espalda. No era la primera vez que experimentaba algo así, por lo que en seguida pensó que estaba sufriendo lo que un médico le diagnosticó años atrás: piedras en los riñones.

Por eso, llamó a una ambulancia para que fuera a buscarla a su hogar, situado en la localidad de Locust Grove (Georgia, Estados Unidos). Cuando los técnicos de emergencia la tumbaron en la camilla y la exploraron, le hicieron una pregunta que le extraño: “Señora, ¿de cuántos meses está embarazada?”. Aunque la pregunta le molestó un poco, Stephanie pensó que era una broma y no le dio mayor importancia. Les respondió que no solo no estaba en estado de buena esperanza, sino que también acaba de tener su periodo.

Pero cuando la ambulancia llegó al hospital, los médicos que allí la recibieron siguieron con la ‘broma’ y lo primero que le dijeron fue que tenía que hacerse un escáner de ultrasonidos, una prueba típica para las mujeres que están embarazadas. Entonces supo que los profesionales que tenía alrededor ya no estaban haciendo un chiste.

“Me quedé en shock”, revela Jaegers. “Pasé de estar en mi casa buscando síntomas de piedras en los riñones en Internet a estar en un estado de pánico al saber que no solo estaba embarazada, sino que estaba dando a luz”, explica la mujer en una publicación de Facebook. “La mayoría de los padres tienen 9 meses para prepararse para esta bendición, pero nosotros solo tuvimos 30 minutos”.

Y no solo eso. Por si fuera poco, el bebé de Stephanie iba a venir al mundo con problemas. “Los médicos me dijeron que venía de nalgas”, recuerda en declaraciones concedidas a la CNN . Pero felizmente, el parto salió bien y por fin pudo abrazar a su hijo, una criatura que apenas dos horas antes le era completamente desconocida.

Así nació Shaun Jude, el cuarto hijo de Michael y Stephanie Jaegers. La pareja se congratula de que su retoño esté sano, pero los dos recuerdan que en los últimos meses la madre practicó numerosas conductas que los expertos en embarazos desaconsejan completamente. Como ella desconocía su estado, subió a varias montañas rusas apenas un mes antes del parto. Dos meses antes, se rompió el codo y los médicos le hicieron varias radiografías.

Sobre las sensaciones que experimentó en las últimas semanas, Stephanie reconoce que no se sentía muy bien y que notaba algo raro en su pecho. Los médicos le dijeron que al estar Shaun en una postura extraña, es probable que le estuviera oprimiendo las costillas. Además, la madre notaba una sensaciones extrañas que atribuía erróneamente a un estado de premenopausia. menopausia. Shaun es la prueba viviente de que Stephanie no puede estar más lejos de esa etapa vital.