Acosador rastrea a una estrella pop en Japón por el reflejo de sus ojos en una foto
Un inusual caso de acoso y agresión a una estrella pop se produjo en Japón, cuando un fanático logró rastrear el lugar exacto en el que se encontraba la víctima gracias al reflejo de sus ojos en una foto publicada por ella a las redes sociales.
El hombre, identificado por la policía como Hibiki Sato, enfrenta cargos de acoso y agresión sexual por presuntamente seguir a la joven artista a su residencia la noche del pasado 1 de septiembre y abusar de ella.
Sato, de 26 años, dijo a las autoridades que había logrado identificar una estación de tren reflejada en los ojos de la cantante, en una selfie que publicó en Internet. Luego esperó en la terminal hasta que vio a su víctima y comenzó a seguirla.
El perturbador caso ha avivado nuevamente el debate sobre la divulgación de información personal en las redes y el acoso cibernético, en especial hacia figuras del entretenimiento y las “aidoru” o “idols” (estrellas pop japonesas).
En 2016, la cantante Mayu Tomita quedó en estado crítico después de ser apuñalada varias veces por un fan mientras esperaba para actuar en un concierto en Tokio. Un ataque menos violento fue reportado en diciembre pasado por Maho Yamaguchi, del grupo NGT48, quien fue agredida por dos desconocidos en la puerta de su casa.
La víctima de Sato fue identificada como Ena Matsuoka, una “aidoru” de 21 años miembro del grupo de J-pop Tenshi Tsukinukeni Yomi.
1日遅れちゃったけれどくるみちゃん!デビューからこの7人で過ごした短かったような、とても長かったような、すてきな時間をありがとう🐈🐈
人一倍優しくツキヨミを癒してくれたお姉さん。くるみちゃんの選んだ道をとことん応援します!だいすき𓍯#ツキヨミ#天使突抜ニ読ミ pic.twitter.com/7mRywH7QRv— 松岡笑南@天使突抜ニ読ミ (@matsuokaena) October 7, 2019
Se sabe que Sato la arrastró lejos de su puerta y la llevó a un área apartada, donde tocó su cuerpo repetidamente hasta que ella pudo escapar. Matsuoka informó el incidente a la Policía Metropolitana de Tokio y les mostró las contusiones faciales que le causó el hombre.
El sospechoso dijo que, después de ampliar la imagen de sus ojos, utilizó Google Street View para identificar la estación.
También confesó que había estudiado videos que la mujer filmó en su departamento mirando detalles como la colocación de cortinas y la dirección de la luz natural que entra por la ventana para tratar de determinar exactamente en qué piso vivía.
Shuichiro Hoshi, profesor de la Universidad Metropolitana de Tokio y experto en los riesgos de las redes sociales, dijo al Tokyo Reporter que la calidad de imagen en las cámaras de los teléfonos inteligentes actuales ha aumentado el riesgo de que la información privada “se filtre inesperadamente”.
“En otras palabras, el riesgo de un llamado 'acosador digital' está en aumento”, aseveró.
El diario Tokyo Shimbun, citado por la agencia AP, advirtió a los lectores que incluso los selfies casuales pueden mostrar edificios circundantes que permitirán a las personas identificar la ubicación de las fotos.
También indicó que la gente no debería hacer el signo V con la mano, costumbre entre los japoneses, ya que podrían “robarle” las huellas digitales.
Según reseñó, el acoso cibernético ha sido un problema durante años en Japón, con delincuentes que utilizan la piratería, la activación clandestina de micrófonos y cámaras y otros métodos para rastrear a sus víctimas.