Abuelo chileno logra rescatar a sus siete nietos, huérfanos de ISIS, de un campamento en Siria

Por Fari Rafa-. Patricio González recordará siempre este día porque la vida le ha dado una segunda oportunidad para recuperar a sus nietos, algo que parecía totalmente imposible hace apenas unas semanas.

La hija de Patricio y su marido eran yihadistas del Estado Islámico y dejaron huérfanos a sus siete niños, quienes hasta hoy sobrevivían en un campamento de refugiados dirigido por kurdos donde duermen otros 2,500 pequeños extranjeros.

Los siete hermanos, de nacionalidad sueca pero origen chileno, fueron rescatados de las instalaciones de al-Hol, al noreste de Siria, una zona en la que buscan refugio cerca de 75,000 yihadistas en una suerte de limbo tras la caída de su autoproclamado “califato”.

Desesperado por conocer el paradero de sus nietos, Patricio había viajado a Siria y, aunque afortunadamente logró contactarlos, se encontró con que los pequeños estaban enfermos y en evidente estado de desnutrición.

“Están con problemas pulmonares, tienen fiebre, es muy terrible la situación de los niños. Yo quiero sacarlos de ahí lo más pronto posible porque es una situación de emergencia donde cada día está muriendo un niño en ese campamento”, explicó a la prensa chilena.

Fue entonces cuando solicitó ayuda al gobierno de Suecia y al de Chile, así como a la Cruz Roja de Erbil, ciudad iraquí controlada por los kurdos. Pero durante el transcurso del pasado mes, ninguno de los funcionarios que lo atendieron le garantizaban una pronta solución.

Hoy, medios de prensa en Suecia, país donde radica actualmente Patricio, han confirmado que el chileno de 50 años y sus siete nietos están prontos a reencontrarse. Los pequeños han sido trasladados desde al-Hol hasta Erbil, en Irak, donde los espera su abuelo.

Los siete hermanos se encontraban entre los 10,000 ciudadanos no sirios y no iraquíes que viven como pueden en una sección “restringida” del extenso campamento kurdo. Afortunadamente, no correrán con la misma suerte de otros 211 niños fallecidos por desnutrición y enfermedades desde diciembre.

Panos Moumtzis, coordinador humanitario de las Naciones Unidas (ONU) para la crisis de Siria, ha insistido en que los estados involucrados tienen una responsabilidad legal, especialmente con los niños, muchos de los cuales nacieron en los campamentos de ISIS.

“Los niños deben ser tratados ante todo como víctimas” e “independientemente de la afiliación familiar”, resaltó en declaraciones a la prensa el pasado 18 de abril.

La situación de los menores se complica aún más porque la mayoría de los estados no tienen la capacidad de ofrecer servicios consulares o cómo acceder a sus ciudadanos en el área. Otros buscan despojarlos de su ciudadanía.

El último bastión de la organización terrorista ISIS, Baghouz, cayó el pasado 23 de marzo. Desde fines de 2018, miles de civiles -fundamentalmente mujeres y niños- que estaban afiliados a ISIS están refugiados y enfrentan un destino incierto.