Después de varios años de reclamos por parte del sector estudiantil, la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires aprobó este jueves la extensión del Boleto Educativo a los alumnos universitarios, terciarios y de educación especial ya sea de gestión pública o subvencionada al 100%.

De esta manera, durante la sesión maratónica de este jueves, los legisladores acordaron ampliar dicho boleto a la educación superior en todas sus modalidades: Institutos de Educación Superior; Universidades o instituciones universitarias; Centros de Formación Profesional; Instituciones de Educación Especial. De esta forma, se busca abarcar el abanico de instituciones educativas que estén orientadas a formar profesionales, docentes y técnicos dentro de la Ciudad.

Asimismo, se aumentó la cantidad de viajes mensuales a 96, manteniendo el tope de cuatro viajes diarios, a utilizarse en los días en que se cuente con actividades educativas (de lunes a sábado).

Otra de las importantes ampliaciones de esta medida es la incorporación de los acompañantes para todos los menores de 12 años, de esta forma, se busca prevenir que sean removidos de la escuela por dificultades de pagar los costos del pasaje de sus padres o tutores legales. De esta manera, accederán a la Tarifa Social SUBE (boleto subvencionado al 55%).

La votación tuvo una amplia aceptación. Solo votó en contra el diputado mileísta Ramiro Marra y el resto de los legisladores libertarios –Rebeca Fleitas, Marina Kienast, Lucía Montenegro, María del Pilar Ramírez y Leonardo Saifert– se abstuvieron.

Respecto de la aprobación de esta iniciativa, el legislador del Partido Obrero (PO) Gabriel Solano le explicó a LA NACIÓN que, si bien acompañaron el proyecto, el mismo se “queda corto, es un proyecto amarrete. Porque no tenemos un boleto educativo, como habíamos pretendido varios. ¿Qué significa educativo? Que abarque tanto a los estudiantes como a los docentes. Acá los docentes fueron excluidos, y también se excluyó porque este es un boleto estudiantil para el nivel superior, ya existe para los otros niveles”.

Por su lado, el legislador de la Coalición Cívica (CC ARI) Hernán Reyes consideró que “la ampliación del boleto estudiantil a los estudiantes universitarios es un esfuerzo que queremos hacer para apoyar a nuestros estudiantes. La Ciudad es un gran centro de innovación y de estudios, queremos apoyar con todas las herramientas que tengamos a disposición”.

Impacto en el presupuesto

A su vez la diputada de La Libertad Avanza (LLA) y referente de ese espacio en materia de educación, Marina Kienast, explicó que “el boleto estudiantil es una herramienta importante para que los estudiantes puedan trasladarse y no abandonen los estudios” y agregó: “Sin embargo, ese boleto estudiantil no puede ampliarse a todos los niveles cuando no tenemos un número estimativo de a cuántos estudiantes estaríamos cubriendo con esta nueva ley”.

“En un momento donde el país está achicando el Estado, y sus gastos, el Gobierno de la Ciudad no puede pretender generar semejante impacto en el presupuesto, sin ni siquiera tener un estimativo de cuanto le va a costar y tampoco puede pretender que se vote algo que no está incorporado en el presupuesto que se vota hoy”, opinó.

En contraposición el diputado de Vamos por Más (VxM) Sergio Siciliano aseveró que “esta modificación de la ley reafirma el compromiso del Gobierno porteño con la educación. La ciudad de Buenos Aires, es pionera en implementar políticas para fortalecer la educación y los procesos de aprendizaje siempre con una mirada integral”.

“Buenos Aires es una ciudad educativa e inclusiva que da respuesta a las nuevas necesidades, frente a un contexto económico complejo, se amplía el beneficio a todos los estudiantes tanto aquellos que cursan áreas de educación no obligatoria, así como también los estudiantes de las universidades nacionales de con sede en la ciudad de Buenos Aires”, argumentó.

Cabe señalar que, en las inmediaciones de la Legislatura, a lo largo de toda la sesión, se desarrolló una marcha universitaria en apoyo a la iniciativa. En ese sentido, la secretaria general de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires (UBA), Tatiana Fernández Martí, aseveró que “este boleto educativo sería un paso enorme para quienes estudiamos en CABA, una de las más caras del país. Con esta conquista podríamos seguir dando la pelea para que no solo puedan disponer del boleto quienes residen en CABA sino para los miles que viajan desde PBA. Vamos a seguir haciendo valer nuestra voz porque quienes residen en la provincia son quienes más usan el transporte, combinando trenes, colectivos y subtes para llegar a cursar”.

“Este proyecto, aunque es un gran avance para estudiantes residentes de la Ciudad deja por fuera a los trabajadores de la educación, docentes y no-docentes, que tienen que vivir con salarios por debajo de la línea de pobreza y destinan un 30% se sus salarios en viáticos”, completó.