El año 2019 cerró con déficit primario y el Gobierno abre la polémica por las cifras

El año 2019 cerró con leve déficit primario y con una fuerte suba del pago de intereses de la deuda. Pese a esa ratificación, el gobierno de Alberto Fernández -que presentó hoy el dato de diciembre- decidió abrir el debate por la profundidad del rojo fiscal que dejó la gestión de Cambiemos.

La situación fiscal no es un tema menor a la hora de la negociación de la deuda y en el marco del programa que el Fondo Monetario Internacional (FMI) cerró con la Argentina. El Stand-By tenía metas fiscales y de eso dependían los desembolsos de dólares. El organismo habilitaba para 2019 un déficit primario de 0,5% del PBI.

El déficit fiscal primario de 2019 fue de $95.121,6 millones, lo que equivale a un 0,44% del PBI. El rojo financiero (incluye los pagos de deuda), en tanto, llegó a 819.406 millones, un 3,76% del PBI. Sin embargo, el equipo de Martín Guzmán y, más precisamente, el del secretario de Hacienda, Raúl Rigo, sumó a sus informes dos líneas de análisis en las que detectaron "recursos extraordinarios" -ingresos que sólo estuvieron en 2019- y, por otro lado, una deuda flotante.

Si se considera lo que el equipo de Rigo denominó "recursos extraordinarios", el déficit primario habría alcanzado $208.766,7 millones (0,96% del PBI), mientras que el rojo financiero habría ascendido a 933.052 millones (4,28% del producto). En tanto, si se corrigiera el déficit primario según la deuda exigible, el rojo primario habría sido de 1,66% del PBI.

Los ingresos totales de 2019 llegaron a $3.937.073,5 millones, un alza de 51,4% interanual, levemente por debajo de la inflación. "Sobresalieron los derechos de exportación (+304,6% interanual) y el IVA neto de reintegros (+38,4%)", dijo Economía. En el Gobierno calcularon que, si no se contaran los recursos extraordinarios -de capital y corrientes-, la tasa de crecimiento de esos ingresos hubiera sido siete puntos menor, de 44%.

Los gastos llegaron a $4.032.195,1 millones, una suba de 37,2% interanual. Las prestaciones de la seguridad social tuvieron un crecimiento del 44,5% interanual. Allí se destacaron las asignaciones familiares (+40,9%), y las jubilaciones y pensiones contributivas (+44,5%), ambas con decrecimiento en términos reales. Por otra parte, el gasto de capital tuvo el año pasado un aumento de 12,4%, en el que se destacaron las variaciones negativas en Educación (-36,2%), Vivienda (-12,9%) y Energía (-9,5%), mientras que Transporte (+55,7%) y Agua potable y alcantarillado (+28,8%) registraron porcentajes positivos.

Los subsidios económicos el año pasado llegaron a $338.409 millones, lo que reflejó un crecimiento de 20,3% respecto de 2018 ($281.237 millones).

Los recursos extra que halló la nueva administración fueron: $4813,6 millones en rentas de la propiedad, por el traspaso de Lotería a la Ciudad de Buenos Aires; $64.236 millones que figuran como recursos de capital en la seguridad social y que tuvieron que ver con el traspaso de dinero del Fondo Garantía de Sustentabilidad (FGA) a la Anses para hacer frente al pago de la reparación histórica a jubilados, y $44.595,5 millones de recursos de capital por la venta de las centrales Barragán y Brigadier López, y la cesión de Aguada del Chañar a YPF.

Por otro lado, en el Gobierno afirmaron que otra de las situaciones que mejoraron el resultado del macrismo tuvo que ver con el adelantamiento del pago de derechos de exportación por $52.233 millones en 2019, lo que impulsó dicha recaudación y empeoró la de 2020. Además, se retrasaron los reintegros del IVA, lo que dejó pendientes para este año -explican los funcionarios- devoluciones por $6492,4 millones correspondientes al año pasado.

"En 2019 se evidenció un aumento de la deuda exigible con respecto a 2018. El mismo fue de $93.165,3 millones, que está explicado por la diferencia entre el stock correspondiente a 2019 ($282.349,8 millones) y el de 2018 ($189.184,5 millones)", indicó Economía. "Si se tomaran en consideración los ingresos mencionados (el adelantamiento de los derechos de exportación y los retrasos en los reintegros del IVA) y el incremento de la deuda exigible, el déficit primario alcanza a $360.657,4 millones (1,66% del PBI), mientras que el financiero aumenta a $1.084.942,7 millones (-4,98% del PBI)", argumentó el equipo económico.

En diciembre, en tanto, el rojo primario llegó a $120.143,2 millones. El resultado negativo tuvo que ver con la estacionalidad del mes, pero además con las medidas que tomó el gobierno entrante. La doble cuota de $5000 para los planes sociales y los pagos a jubilados y pensionados, y a aquellos que cobran la asignación universal por hijo (AUH). Todo el paquete de mejoramiento de ingresos tuvo un impacto -según el Gobierno- de $30.000 millones.

En el Gobierno hablaron de una "situación fiscal delicada" en un "contexto preocupante", y de cierta "fatiga" del Tesoro. Allí no quisieron adelantar estimaciones sobre el resultado de las cuentas públicas de cara a 2020. "La idea es tender al equilibrio, pero la velocidad depende de la situación macroeconómica y de la renegociación de la deuda", indicaron. Además, aclararon que no se modificó la metodología de cálculo ni se sumaron ganancias del Banco Central.

Uno de los números probablemente de más impacto en 2019 con relación a los datos fiscales tuvo que ver con el fuerte crecimiento de los intereses de la deuda (por la caída del PBI, la devaluación y deuda nueva en moneda extranjera), que llegaron a computar $724.285 millones, con un alza de 86,2%. El monto total equivale a 3,33% del PBI.