9 recomendaciones del BID para recuperar el empleo en la región, tras lento arranque post covid

Una investigación del BID da cuenta sobre la lenta recuperación del empleo en la región, tras el retroceso que sufrió la economía global por la pandemia. Advierte que impulsar el financiamiento y la digitalización es necesario

La covid no solo enterró a millones de muertos. También, mató a miles de puestos de trabajo en todo el mundo. Tan solo en Latinoamérica la tasa de participación de la fuerza laboral se redujo en un 17% durante la primera ola de la pandemia a mediados de 2019, según un informe publicado recientemente por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

Y aunque en la mayoría de los países los niveles del PIB han retomado su etapa previa a la covid, la recuperación del empleo ha sido mucho más lenta de lo previsto. “No se sabe todavía si el desfase en el ritmo de la recuperación será permanente o transitorio”, advierte el informe.

La investigación del BID tiene la esperanza puesta en la experiencia de países como Argentina, Brasil, México, Bolivia Ecuador, Paraguay y Uruguay, cuya recuperación de la pandemia ha sido acelerada. “En muchas economías, incluidas las de Barbados, Chile, Colombia, Costa Rica, Jamaica, Nicaragua, Perú y República Dominicana, el empleo total aún no ha alcanzado su nivel previo” a la crisis sanitaria.

Entre los sectores más afectados están las mujeres, quienes –en líneas generales– no logran retomar sus niveles de empleo previos a la pandemia. “Es de esperar entonces que el efecto de la pandemia en la pérdida de empleo se prolongue durante algún tiempo. La pérdida de empleo y la caída del número de horas de trabajo fueron también desproporcionadas en las empresas de menor tamaño, en comparación con las más grandes”.

Las recomendaciones

En esta línea, la investigación del BID desarrolló 9 recomendaciones para los gobiernos de la región, ante el desafío y las oportunidades que afrontan las empresas y los mercados laborales en este momento:

1. Crear programas nuevos de apoyo a las empresas. El informe sugiere que cada país conforme una institución independiente, con representantes públicos y privados, que trabaje para apoyar a “empresas con buenas perspectivas”. La idea sería identificar compañías con “buenos modelo de negocios”, pero que tras la pandemia no pueden estar en condiciones de invertir para recuperar el stock de capital que perdieron.

2. Promover la digitalización y la adopción de nuevas tecnologías. Exhortan a los gobiernos a trabajar para evitar que Latinoamérica se “rezague aún más” en la adopción de prácticas digitales y tecnológicas. Por ello, sugieren priorizar inversiones en infraestructura, como el acceso a internet de alta velocidad. También, consideran como una buena práctica la creación de fondos que apoyen las iniciativas empresariales en esta materia.

3. Impulsar la entrada de empresas sólidas. Los analistas advierten que sería un error dar apoyo sin discreciones a las empresas solo por ser pequeñas o durante periodos muy prolongados A su juicio, los programas deben apuntar a ayudar a que las organizaciones desarrollen ideas de negocio y a plasmarlas en planes realistas y rentables.

4. Introducir reformas a los procedimientos de reorganización y quiebra de empresas. Sugieren a los países adoptar mecanismos de flexibilización sobre procesos de insolvencia, como existen en EEUU. La idea es que tribunales específicos puedan decidir sobre los casos de patrimonio empresarial con criterio de independencia.

5. Crear un nuevo foro sobre insolvencia. Consideran que será necesario crear un foro internacional que proporcione a los países conocimientos técnicos sobre cuestiones de insolvencia y garantice la coherencia entre países. Los analistas advierten que se debe buscar que las reglas que operan en el ámbito nacional sean coherentes con los procesos vigentes en otros países.

6. Fortalecer la protección de la inversión. El informe del BID considera que los países deben utilizar o desarrollar mecanismos que faciliten consultas sustanciales transparentes sobre cuestiones que tengan impactos significativos en el ámbito económico y de inversión.

7. Abordar los problemas de los programas de capacitación técnica de ciclo corto. Entendiendo la necesidad de formación y capacitación del personal, entre las recomendaciones se sugiere que los estados incrementen la financiación de los programas de ciclo corto, que suelen utilizar los estudiantes con menos recursos.

8. Implementar políticas encaminadas a mejorar las habilidades para la era digital. Los investigadores detectaron que una de las limitaciones para una digitalización rápida en la región es la falta de habilidades idóneas. Por eso, sugieren a los países subsidiar la capacitación en el área, fomentar la colaboración dentro de cada industria y desarrollar programas que mejoren los empleos actuales.

9. Adoptar reformas más generales para los mercados laborales. Entre las líneas generales del informe, plantean la necesidad de reducir los impuestos al trabajo, permitir una mayor diversidad en las modalidades de contratación de mano de obra, así como mejorar las políticas de apoyo al empleo de las mujeres.

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