5 razones que explican por qué hay tantos atentados en Turquía en los últimos meses

Turquía ha vuelto a ser escenario de la barbarie. El mundo vive una ola de atentados que ha tenido el aeropuerto de Ataturk de Estambul como última parada. Poco antes había sido en Mogadiscio (Somalia), Líbano (Beirut) o ya hace algunos meses en Bruselas o en París por citar algunos ejemplos.

Sin embargo, el país otomano se ha convertido en uno de los objetivos preferidos de los terroristas, tal y como indican los datos: desde que empezó el año 2016 se han producido 12 ataques hasta el momento que han dejado cientos de muertos y de heridos. El 2015 no fue mucho mejor, ya que en octubre un brutal atentado en Ankara dejó 128 fallecidos. Estas son algunas de las razones que explican que Turquía sufra hoy en día tantos ataques.

Atentado en el aeropuerto de Estambul (EFE).

1. Contagio de la guerra de Siria por culpa de la porosa frontera

En los últimos meses el DAESH ha ido ganando cada vez más presencia en suelo turco y son los responsables de algunos de los atentados más importantes como el de octubre de 2015 en Ankara mencionado anteriormente o el que se produjo en enero de 2016 en el turístico Hipódromo de Constantinopla matando a al menos 10 personas.

La principal razón es que desde el comienzo de la guerra siria la frontera entre ambos países, que comprende una enorme extensión que supera los 800 kilómetros, ha sido muy porosa, permitiendo el paso de mucha gente que huía del conflicto. Recordemos que el país otomano ha sido el principal receptor de refugiados con casi 2 millones.

El problema es que además de gente que escapaba de los combates, también han pasado por esa frontera miembros del Daesh que se han infiltrado en el país y que ahora cometen este tipo de atentados, algo que desde hace meses ha sido denunciado por las potencias occidentales.

Refugiados sirios en los países cercanos en julio de 2015 (ACNUR).

2. Fin del alto el fuego del PKK

Desde hace casi cuatro décadas Turquía vive inmersa en un conflicto interno con los kurdos. El Kurdistán es un territorio que se repartieron cuatro países (Turquía, Irak, Irán y Siria) y los kurdos exigen mayores derechos políticos y culturales, así como la independencia o una mayor autonomía.

En el país otomano, la resistencia está encabezada por el Partido Kurdo de los Trabajadores (PKK), considerado un grupo terrorista por Turquía, Estados Unidos o Europa y que desde hace décadas ha cometido atentados en suelo turco. En los últimos años ha habido negociaciones y un alto el fuego, pero el fin de este, tras no tener éxito las negociaciones, ha provocado que se reanuden los ataques.

3. La radicalización del PKK, aparece el TAK

El conflicto entre Turquía y los kurdos ha provocado escisiones dentro del PKK. Una de ellas ha sido la de los Halcones de la libertad del Kurdistán (TAK), que apareció en 2004 y que es un grupo mucho más radicalizado. Entre sus objetivos están los lugares turísticos, los edificios gubernamentales y las instalaciones militares.

Han sido los autores de varios ataques en el último año como por ejemplo el de marzo de 2016 en Ankara que acabó con la vida de 37 personas o el de febrero de 2016 en la misma ciudad en el que fallecieron 29 personas.

Ataque en Ankara en marzo de 2016 (Reuters)

4. La responsabilidad de Erdogan

El papel de Erdogan está siendo clave y su pasividad determinante para que continúe la ola de atentados. Las potencias occidentales han acusado al Gobierno turco de permitir la entrada de terroristas en el país sin hacer nada.

Solo cuando ha negociado con la UE el conocido acuerdo por el cual los europeos le mandan de vuelta a los refugiados ilegales que lleguen ha endurecido un poco sus fronteras, pero evidentemente ya era tarde, ya que se cumplían cinco años de la guerra en Siria.

Tras los últimos ataques en Estambul ha asegurado que “podía haber pasado en cualquier ciudad del mundo”, obviando que actualmente Turquía sale a más de un gran atentado por mes (12 ataques en seis meses que llevamos de 2016).

5. Atacar a un país muy turístico y así tener más impacto

No es casualidad que el objetivo sea una y otra vez Turquía. Pese a que en Siria, Irak o Afganistán se producen atentados a menudo, no tienen la misma repercusión que en el país otomano. ¿Por qué? En primer lugar hay que distinguir entre el DAESH y los kurdos.

En el caso de los primeros, atentan donde tienen la capacidad para hacerlo. Ya lo hicieron en Europa y en Turquía han encontrado también la forma de perpetrar sus atentados. Además al ser un país tan turístico logran tener un impacto internacional muy alto.

En el caso kurdo, el objetivo es causar dificultades en suelo otomano y atacando lugares con turistas logran reducir el número de visitantes y así presionan económicamente al Gobierno para que atienda a su causa.

Javier Taeño (@javiertaeno)

Atentado contra turistas extranjeros junto a la Mezquita Azul (Reuters).