Yahoo Noticias “La Corrupción somos todos”, la frase que sigue definiendo a México
Hace algunos años, en referencia al problema de la Corrupción, el lema de campaña de Miguel de la Madrid fue “La Solución somos todos”, el ingenio popular rápidamente cambió este propósito por el de “La Corrupción somos todos”. Treinta años después el presidente Enrique Peña Nieto se comprometió a combatirla mediante la creación de una Fiscalía Anticorrupción con la que sería sustituida la Secretaria de la Función Pública.
Las circunstancias de los últimos meses, más que la voluntad de los políticos, presionó para que se legislara. Diputados y senadores aprobaron la Ley que crea el Sistema Nacional Anticorrupción y remitieron a los congresos estatales, para su aprobación, diversos cambios a la Constitución en materia de combate a la corrupción, que deberán de aprobar cuando menos 17 congresos locales.
El Sistema Nacional Anticorrupción fue definido como “la instancia de coordinación entre las autoridades de todos los órdenes de gobierno competentes en la prevención, detección y sanción de responsabilidades administrativas y hechos de corrupción, así como en la fiscalización y control de recursos públicos”.
Con las reformas a la Constitución la Federación y los estados podrán revisar el uso del erario federal y estatal así como la manera como los gobernadores utilizan los recursos fiscales de la distribución federal de impuestos.
La creación de este sistema es un paso importante en el combate a la corrupción, pero, según Juan Manuel Portal, Auditor Superior de la Federación, para que se consolide, genere hechos concretos a favor de los mexicanos y en contra de este problema, deberán pasar de dos a tres años, señaló que lo aprobado, requiere de leyes secundarias que definan lo que mandata la Constitución.
Legisladores de los partidos Acción Nacional y de la Revolución Democrática consideraron la creación del sistema anticorrupción como insuficiente debido a que no se reformó el artículo 108 de la Constitución, referente al fuero por lo que, a su criterio, se mantiene la impunidad para el presidente. Dicho artículo establece que “El presidente de la república, durante el tiempo de su encargo, solo podrá ser acusado por traición a la patria y delitos graves del orden común.”
El senador del PAN, Javier Corral, propuso que, durante el tiempo de su encargo, el presidente pueda ser acusado también por ejercicio abusivo de funciones, conflicto de interés, tráfico de influencias y cohecho. Por su parte el senador del PRD, Armando Ríos Piter, propuso juicio al presidente cuando cometa violaciones a la Constitución y leyes federales, manejo y aplicación indebida de fondos y recursos federales, delitos de corrupción y delitos graves del orden común. Ambas propuestas fueron rechazadas.
La corrupción en México es un problema social que involucra a personas de todos los sectores sociales. Es una práctica común en el ambiente gubernamental, académico, empresarial, y eclesial, entre otros. Sus referencias históricas son diversas y se reconoce en refranes como “El que no tranza no avanza”, recomendación para participar de la componenda y la corrupción, una más es la que se refiere al que otorga posiciones en la administración pública “No te pido que me des, te pido que me pongas donde hay”.
En todos los tiempos y culturas están registradas las referencias a la corrupción y a su lado se reconocen las leyes que buscan impedirla o regularla. El político y filósofo griego Cornelio Tácito, en el año 75 a.c afirmaba que “Cuánto más corrupto es el Estado, más leyes tiene.”
Hay quien afirma que a la corrupción se le encuentra con mayor frecuencia en los grupos que detentan el poder, y por eso dicen que “el poder corrompe” y que “Todo hombre tiene su precio, lo que hace falta es saber cuál es” (José Fouché).
En México la corrupción tiene un costo muy alto, el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado calcula que es de más de 1.5 billones de pesos, equivalente a 10 por ciento del Producto Interno Bruto, cantidad que los empresarios deben calcular si desean hacer negocios con el gobierno.
En el ranking mundial México, se encuentra catalogado como uno de los más corruptos del mundo y a partir de estas percepciones, en el extranjero se toman determinaciones que podrían afectar la calidad de vida de los mexicanos, como la llegada o no de inversión extranjera, sin la cual no se crean más empleos.
El Sistema Nacional Anticorrupción no va a dar frutos de inmediato, van a pasar algunos años para que veamos sus resultados para beneficio de la sociedad. Los políticos que hoy gobiernan todavía podrán tener su “año de Hidalgo” y, para impedirlo en el futuro, las leyes siempre van a ser insuficientes. Erradicar la corrupción es un tema cultural, de educación a largo plazo, esa que obstruye la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación.
El combate a la corrupción hoy tiene un nuevo aliado en las redes sociales, por medio de ellas es posible denunciar las actos de corrupción de aquellos que tienen poder, en cierto sentido la corrupción es también un acto de poder, de quien impone una cuota o exige una dadiva a cambio de un servicio y en esta categoría se ubican quienes ejercen algún tipo de influencia social, económica, política o cultural. Para desenmascarar a los corruptos, las redes sociales son un instrumento eficaz, pero deben actuar con mesura para evitar lo que combaten.
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