El pino milagroso de Japón vuelve a la vida como monumento

Se cumplen dos años del gran terremoto y posterior tsunami que asoló las costas de Japón sembrando la destrucción y llevándose la vida de unas 20.000 personas. Tras la desolación sufrida, el país nipón se encuentra inmerso en una laboriosa tarea de reparación de las zonas afectadas y en la difícil búsqueda del restablecimiento de la vida de sus ciudadanos.

Para conseguir esa ardua reconquista de todo lo perdido muchos creen necesario encontrar nuevos iconos que simbolicen la esperanza después del desastre y en esa idea se ha erigido como protagonista un pino centenario en la ciudad de Rikuzentakata.

Sus habitantes lo conocen como el pino milagroso y fue el único que sobrevivió de entre los más de 70.000 árboles que componían el bello bosque de la ciudad.

Rikuzentaka se encuentra en la prefectura de Iwate, a unos 400 kilómetros al norte de la capital y era famosa por sus elegantes balnearios junto a la costa rodeados de pinares. De toda aquella masa forestal tan solo quedó en pie este imponente ejemplar de más de 80 metros de alto que pronto se convirtió en el símbolo de la reconstrucción del lugar.

Sin embargo, la gran ola que asoló todo a su paso también introdujo altos niveles de salinidad en el subsuelo, lo que hizo que el pino milagroso quedase muy debilitado.

Durante un tiempo se intentó mantenerlo con vida llegand

o incluso a abrir una página en Facebook en la que se buscaban apoyos económicos para aplicarle un costoso tratamiento contra la salinidad.

Finalmente, y a pesar de sobrevivir 18 meses después del tsunami, el árbol, muy debilitado ya, sucumbió al salitre marino y acabó muriendo… pero su historia no iba a terminar aún.

Las autoridades decidieron conservar la memoria del “pino milagroso”: lo derribaron para desecarlo por partes y ahora han vuelto a unirlo para construir con él un monumento como recuerdo a las víctimas del trágico tsunami.

El monumento estará terminado esta misma semana dando así una pequeña alegría a los habitantes de Rikuzentaka que ya consideraban a este árbol una pieza clave sentimental y simbólica en su larga recuperación tras el desastre. Un bonito gesto que vuelve a la vida al árbol superviviente del tsunami en forma de monumento, homenaje a las víctimas y como recordatorio de que se puede resistir incluso en los peores momentos.

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Fuente: Yahoo! España
El pino milagroso de Japón vuelve a la vida como monumento